viernes, 19 de abril de 2013

Nunca escuché los disparos


Mi mamá lloraba pensando en los días que me hizo pasar cuando decidió no moverse del país, “a pesar de todo lo que estaba pasando”, así decía.  Yo tendría como 5 años en ese tiempo en el que “pasaban tantas cosas, fue terrible”.

Ella me contaba que sentía encenderse las ráfagas de las metralletas y se tiraba al piso y me llamaba, como quien busca un cómplice para una travesura.

Allí las dos acostadas en el piso, boca abajo, acercábamos un juego de té diminuto. Flores amarillas muy pálidas y delicadas decoraban la taza y la tetera, los platos, el azucarero, el jarrito para la leche. Ella me invitaba a tomar el té. Movía el dedo índice y el medio de su mano y los hacía caminar por el piso como una señora de la misma talla del juego de té y decía: “Buenos días, señora, qué bueno que me vino a visitar” y yo sonreía.

Sus palabras eran la puerta de entrada a un mundo distinto, tan entretenido, donde nunca escuché los disparos que ella ahora recuerda como una pesadilla. Yo sólo guardo en mi memoria a la señora que interpretaban los dedos de sus manos y que me invitaban a tomar el té. Nunca escuché los disparos que tanto la atormentan todavía.

4 comentarios:

  1. Hermoso Pame! Pues nuestros niños están viviendo cosas que tratamos, al mejor estilo de Cinema Paradiso o de la madre de tu historia, de suavizar para que no se nos desanimen. Pero me ha sorprendido la lucidez de los niños de ahora, su madurez... se dan cuenta que el país de hoy no es el de octubre y tocan las cacerolas con intensidad y convicción de que un mejor futuro se abre para ellos. Tengo a varios de los niños del proyecto A jugar en mi pin y me sorprenden cada día sus pequeños comentarios;toman posición y la defienden. Gracias a Dios tenemos frente a nosotros una generación de relevo de Buenos Venezolanos!

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  2. Me gustó mucho tu post! A mi me hizo recordar la película: "La vida es bella"... Si yo tuviera hijos pequeños no sabría como manejar esta situación política (que tanto nos afecta) con los niños. Nada fácil. Felicitaciones!

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  3. Muy conmovedor tu relato Pame, ojala que esto que se esta viviendo en Venezuela sirva para que nunca mas nuestros pueblos vuelva a repetir los mismos errores! Dios nos proteja y nos ayude a salir fortalecidos!! Un abrazo

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  4. Muy lindo Pamela, un beso grande

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